El PSOE votó en contra del documento de subsanación de deficiencias del PGMO de Totana porque sigue sin tener argumentos técnicos, ni políticos para cambiar su voto. Desde que se comenzó la tramitación de este PGMO este partido ha tenido la misma posición y ha votado siempre en el mismo sentido: en contra.
Este partido no va a apoyar un PGMO que no cuenta con la suficiente participación ciudadana, ni apoyo social necesario para que se convierta en el principal instrumento de desarrollo del municipio de Totana.
Este PGMO está basado en un modelo de ciudad que pensaba en la especulación del suelo, el crecimiento incontrolado y al calor de la burbuja inmobiliaria.
El tiempo, poco a poco, nos va dando la razón y el modelo de ciudad que necesita Totana no es el de este plan. Necesitamos un modelo basado en la sostenibilidad, en la participación, y en la mejora de lo ya urbanizado y construido.
Aspecto que creemos fundamentales como son el mantenimiento de los convenios urbanísticos, la rebaja de alturas con respecto de normas subsidiarias en el casco urbano, viales innecesarios como el del Trasvase o innecesarios y sin consenso suficiente como el de Los Sifones, los grandes sectores de suelo urbanizable sectorizado que estrangula el casco urbano entre otras cosas hacen imposible que el PSOE pueda votar a favor. A esto se le suma que los ciudadanos no han podido conocer las modificaciones que este documento produce porque no se ha sometido a exposición pública y, por tanto, no han podido alegar los posibles afectados o la ciudadanía en general. Esto nos reafirma en nuestra postura porque creemos básica la participación ciudadana en cualquier punto de la tramitación de un plan general.
Hemos presentado a todos los grupos políticos con representación municipal medidas concretas para la búsqueda del consenso pero a día de hoy ningún grupo se ha pronunciado al respecto.
Nadie duda de la necesidad de un Plan General en Totana, pero eso es excusa para aprobar el Plan General que está basado en el modelo de Juan Morales y las corruptelas. No debemos conformarnos con un Plan General, que como todo el mundo sabe, tiene muchas posibilidades de acabar tumbado en los tribunales por diversos motivos de peso. Y si esto llega a ocurrir, aquellos que se han empecinado en seguir adelante con esta tramitación deberán asumir sus responsabilidades.