Los medios digitales han puesto a nuestra disposición, de un modo nuevo, el mundo del conocimiento y de la creación. Nunca ha sido tan fácil acceder a la información y a los contenidos. Los libros impresos y las clases presenciales son necesarias, pero es posible también el autoaprendizaje y la autoformación.
Hoy en día se puede estudiar cualquier carrera a través de Internet, aunque haya una parte práctica y aplicada que, en muchos casos, debe realizarse de una manera presencial y bajo supervisión y control riguroso.
Las universidades a distancia y online cada vez son más numerosas por razones que dependen del ritmo de vida actual y de la aceleración generalizada de la existencia en Occidente.
Los repositorios digitales de libros, artículos, etc., ofrecen a los lectores, investigadores y estudiosos una infinidad de materiales escritos y de otros tipos. Esto no ocurría en el pasado. Además, la creciente digitalización de numerosos libros es otra realidad que no puede quedar en el olvido y que posee una gran importancia.
El constante incremento de libros y otros documentos que son pasados a PDF enriquece, muy considerablemente, la accesibilidad y disponibilidad de tesis doctorales, trabajos de investigación, ensayos, tratados, etc. De este modo, los libros pueden ser impresos desde un soporte digital.
En relación con la creación se puede observar un avance similar. Me atrevería a decir que es más espectacular si cabe. Cualquier persona puede escribir y publicar a través de los medios digitales.
Los periódicos digitales, por ejemplo, son un claro ejemplo de las ilimitadas posibilidades que ofrece la era digital para la difusión de las creaciones de los autores. La inmediatez y rapidez de lo digital de cara a la visibilidad de los contenidos informativos y culturales es prodigiosa y supera ampliamente a la de los medios impresos tradicionales. Lo publicado digitalmente puede ser leído en cualquier parte del mundo de modo inmediato y al instante.
Además, uno de los aspectos más valiosos de las publicaciones digitales es que permanecen visibles en Internet para siempre. Conforman una red de enlaces e interconexiones muy poderosas que benefician la visibilidad de las creaciones de cada autor y lo da a conocer cada vez más con el paso del tiempo.
Si a esto se une la función multiplicadora de las redes sociales y de los buscadores de Internet en el marketing de los contenidos publicados se comprende que lo digital es el presente y el futuro.
Y la visibilidad es igual o superior en los medios de comunicación digitales que en los de papel, ya que la gente cada vez lee más noticias y artículos a través de las tabletas, los móviles y los ordenadores.
De hecho, en algunos países ya han prescindido algunos periódicos de sus ediciones en papel y siguen publicando en formato digital, porque es más barato y rentable.
Además, es evidente que conviven el papel y lo digital. Son complementarios y no excluyentes. En realidad, lo digital en abierto al permitir insertar publicidad es otra fuente de financiación y ganancias para los medios de comunicación.