Escucho la defensa a ultranza que se hace en este pueblo, por parte de alguna gente sobre las alturas en las edificaciones en el Casco Antiguo de Totana y os plantéo algunas reflexiones:
¿La vivienda es un derecho o un negocio donde prima el beneficio económico por encima de las personas que habitarán en la misma?
¿La vivenda es solo el interior de la casa o los espacios y servicios públicos cuando salimos al exterior?
¿Debe un Plan General de Ordenación Urbana pensar en la vivienda como negocio y beneficio especulativo o pensar en el usuario (Usuarios) de ese derecho básico y fundamental?
¿El modelo del a izquierda son las alturas en el casco antiguo? ¿Donde están los aparcamientos, jardines, calles, dimensión de las redes de agua, saneamiento...? ¿Quién paga luego esa falta de Equipamiento Público tan importante como el lugar y espacio donde vivimos? ¿Los que se beneficiarían -económicamente-, de más alturas o el pueblo?
El modelo de desarrollismo urbano del tardo franquismo, tipo "Casa del Coño", "Vaticano", pisos junto a la Fuente Juan de Uzeta, Ramblar, frente a la Verja, Raso de la Maderera, Plaza del Chamones... ¿es el de la Izquierda? Si es así, yo me declaro "apátrida".
¿Alguien se ha dado cuenta las alturas que se edifican en la Avenida Ginés campos de Alhama, mucho más amplia que nuestra Rambla o Juan Carlos I?
¿Es correcto que existan calles den Totana en las que no entra el sol en todo el día los 365 del año?
Si la derecha no defiende sus conceptos urbanísticos de crecimiento especulativo en este momento, será su problema y su contradicción. Pero no el mío, que entiendo la vivienda como un derecho básico donde prime la calidad de los servicios y el bienestar de las personas que habiten en el espacio básico vital del ser humano y no como un negocio que al final será ruinoso para el pueblo y para el que habita una casa, sin condiciones externas mínimas.
Publicado por Juan José Cánovas el 4 de marzo de 2016