El Ayuntamiento de Totana aboga por defender y proteger los derechos de las personas mayores y colectivos vulnerables en la realización de gestiones bancarias y administrativas, en virtud del acuerdo plenario alcanzado por unanimidad a iniciativa del Grupo Municipal Mixto (Cs) y Socialista.
El Consistorio totanero va a instar al Gobierno regional y al de la Nación a establecer acuerdos de colaboración entre la Región de Murcia y las entidades bancarias con la finalidad de garantizar la asistencia y asesoramiento a las personas que lo precisen.
La pretensión es facilitar su adaptación a las nuevas tecnologías que se usan en las entidades bancarias a la hora de realizar transacciones, de manera que se garantice su seguridad y se les ayude a la comprensión de las gestiones bancarias a los colectivos más vulnerables.
Además, se pretende fomentar la implementación de cajeros automáticos adaptados a las necesidades de las personas mayores y personas con discapacidad.
También se quiere reforzar, contando con la colaboración público-privada, las actividades formativas para el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), dirigidas a las personas mayores y colectivos vulnerables.
De igual forma, se pretende apoyar e implementar, con la mayor brevedad posible, la iniciativa para catalogar como “Bancos amigables de las personas mayores” a aquellas entidades bancarias que presten un servicio adaptado a este colectivo.
Por último, se tiene el objetivo de implementar medidas para facilitar la realización de gestiones administrativas por las personas mayores y personas vulnerables como puede ser un teléfono de atención específico dirigido a personas mayores o colectivos vulnerables con la finalidad de que les puedan asesorar en su realización de tareas administrativas.
Asimismo, se aboga por implementar recursos para dotar de asistencia y acompañamiento personal en la realización de gestiones administrativas a personas mayores y colectivos vulnerables.
Estas peticiones se llevan a cabo ante la situación de los recortes de horarios de atención directa en las entidades bancarias y el cierre de algunas de sus oficinas están afectando directamente a uno de los principales usuarios de estos servicios: las personas mayores.
La principal causa es la dificultad que tiene este colectivo para utilizar las nuevas tecnologías que generalmente emplean estas entidades para realizar la mayoría de las transacciones.
Actualmente, en la mayoría de sucursales de los principales bancos, con la excepción de algunas pocas entidades, el tiempo de atención presencial es tan sólo de dos horas al día, lo que ocasiona que se formen largas colas de personas mayores para actualizar su libreta, cobrar un cheque o realizar cualquier tipo de transacción e incluso en algunas no hay atención presencial y en la mayoría de los casos los remiten a los cajeros automáticos, que en muchos casos no saben utilizar o les cuesta entender su funcionamiento.
Además, esta dificultad se agrava en las personas mayores que tienen algún deterioro por la edad o algún tipo de discapacidad dado que los cajeros no son accesibles para todos. Para solventar esta circunstancia, el uso d ellos cajeros debería tener un sistema sencillo, accesible y estandarizado o al menos debería de haber personal de apoyo suficiente.